La Cosecha

La Cosecha

En Chile las avellanas empiezan a caer en el mes de Febrero y, en general, las operaciones de cosecha empiezan cuando existe alrededor de un 30% de la fruta en el piso. La recomendación es de hacer por lo menos dos pasadas, para asegurar que la fruta no se quede demasiado tiempo en el suelo, con el riesgo de que suba el nivel de humedad empeorando la calidad.

La cosecha se puede realizar de forma manual o mecánica; sin embargo, la manual es limitada a huertos pequeños o en los primeros años, cuando las producciones son todavía bajas y en algún caso las condiciones de las entre-hileras no son las más favorables para el trabajo de una cosechadora. La cosecha mecánica, en cambio, se realiza mediante el uso de máquinas cosechadoras que pueden ser autopropulsadas o remolcadas por tractores. Antes, se debe preparar el suelo, quitando las malezas y nivelando de manera que no haya hoyos o irregularidades en el suelo, que puedan atrapar la fruta al momento de ser cosechada. 

Las operaciones de cosecha empiezan ordenando las avellanas en hileras a través de sopladores y/o barredores. Luego, se pasa la máquina cosechadora que, dependiendo del modelo, puede realizar una pre-limpieza de la fruta que, después, es almacenada en carros cosecheros. Una vez llenos, los carros se descargan en un lugar fresco y ventilado y la fruta es enviada lo antes posible al proceso de limpieza y secado.   

De hecho, para asegurar la calidad, es fundamental evitar que la fruta se quede almacenada durante  mucho tiempo húmeda. Además, se recomienda de mantener los contenedores limpios, afinar bien el equipo cosechador y mantener separada la fruta de cada cosecha.